EL DISCRETO Y OSCURO CINE DE LUIS BUÑUEL

“Hay más orden y cordura en una película de Buñuel” reclama el señor Burns a sus empleados de la fábrica nuclear, encabezados por Homero Simpson, que en un simulacro de incendios salieron despavoridos, destruyendo el edificio a su paso. Esto es solo un pequeño reconocimiento de una de las series más icónicas de la televisión, a la fama e impronta del cine de Luis Buñuel, un cineasta que nació en la provincia de Aragón, España, en un muy lejano 1900. Sin embargo, mi primer acercamiento a Buñuel fue tardío. Sabía de la existencia del artista español pues en libros, revistas y programas de cine su mención era recurrente. Pero nunca había visto alguna de sus películas de manera completa. Hasta que en la universidad asistí a la exhibición de Un perro andaluz (1929), en esos ciclos organizados por estudiantes, con cintas de vhs muy usada y un salón abarrotado de estudiantes. Vi el corto de solo 17 minutos, que pese a la calidad de la presentación y los más de cincuenta años de d...