SILICON VALLEY, de J. Altschuler, M. Judge y D. Krinsky
Silicon Valley es una comedia de 6 temporadas de HBO. Cada temporada tuvo 8 capítulos de media hora aprox. cada uno, salvo la última, transmitida a fines del 2019, que fue de 7 episodios.
¿De qué trata? Todo comienza con Richard Hendricks (programador), un tipo habitualmente nervioso, que somatiza su ansiedad cuando debe hablar en público, y que al comienzo carece del liderazgo o la capacidad necesaria para plantarse frente a otros que le demuestran superioridad de algún modo. Richard trabaja en Hooli (un gigante tecnológico del valle de California), y en sus tiempos libres ha creado un algoritmo de compresión de archivos al que denomina “flautista de Hamelin” (“pied piper”). Al despertar un notorio interés en su creación, y viendo así el potencial que éste tiene, muy pronto quiere formar una compañía con el mismo nombre, a la cual se le unen un par de programadores para poder llevar a cabo el desarrollo y comercialización de este producto que podría ser revolucionario.
Por ser el cerebro del producto, Richard pasa a ser el líder
del equipo, sin embargo, él vive en la “incubajadora” (casa) de Erlich Bachman,
quien por ello pretende tener algún tipo de liderazgo e injerencia en el
negocio, queriendo sacar provecho de la prometedora tecnología del “flautista”
y presentándose como el descubridor del talento de Richard y su “mecenas”.
Los otros integrantes del grupo inicial son Dinesh Chugtai
(pakistaní, codificador) y Bertram Gilfoyle (su especialidad son las redes y la
seguridad). Dinesh no tiene carácter, sus decisiones dependen de qué tanto lo
influencian los otros o de llevar la contraria o molestar a Gilfoyle; por otro
lado, Gilfoyle es más irónico, agrio y rebelde (pero desde cierta distancia o
indiferencia), y disfruta de burlarse de Dinesh. Aun así, siempre hacen dupla y
sus cualidades no pueden demostrarse a pleno si no es en contraste con el otro.
También está Nelson Bighetti (alias Cabezón), quien termina
siendo el elemento más débil del grupo, despistado, al que la ola lo lleva,
pero con mucha suerte y al que en algún momento, cuando por su amistad quiere
darle algún cargo en la empresa en formación, Richard pretende hacerlo “un
aprendiz de todo”, pero más bien es un “experto en nada”. Termina quedando
fuera de este “grupo de 5” que es Pied Piper, teniendo igual una presencia
permanente en la trama, pero de forma más bien “satelital”.
A ellos se les une muy pronto Jared Dunn. Originalmente él
trabajaba para Hooli, la gran empresa tecnológica de la cual es dueño Gavin
Belson (quien será el gran antagonista y villano de la serie), y es quien le da
más corazón al grupo. Les da cierto orden y organización, su pasado nunca es
claro, y las pistas que da sobre él dejan una sensación de extrañeza e
incertidumbre, pero aun así es un tipo optimista y de buen humor. Si Richard es
el Quijote, Jared es su Sancho.
Por el lado de Pied Piper también están Mónica y Laurie
Bream, que harán de inversionistas, o el abogado Ron La Flamme, y otro
personaje especialmente destacable que aparece más adelante es Russ Hanneman. En
los años 90s, Russ le dio el palo al gato con la radio en internet y se
enorgullece de pertenecer al grupo de “las tres comas” (es multimillonario).
También pasa a ser uno de los financistas del Flautista, pero lo más llamativo
de él es su personalidad y su fijación con demostrar su éxito.
Como decía antes, el antagonista de la serie es Gavin Belson.
Como hombre de negocios, sus principales características son su astucia y
competitividad, no tolera el fracaso ni que le hagan sombra, por lo que quien
“se le atraviesa” puede salir perjudicado, y para ello busca todas las formas
posibles en las que puede salir victorioso (dinero, legalidad, trampas). Cuando
se entera del algoritmo “pied piper”, primero trata de comprárselo a Richard,
pero luego de negarse éste, su “relación” pasa por distintas etapas e incluso
por algún acercamiento entre ambos.
Dentro del círculo de Gavin Belson podemos encontrar a
Denpok (su consejero espiritual), su jefe de seguridad y el grupo de ejecutivos
que lo asisten y lo admiran. Todos ellos, con más o menos compromiso emocional
o por simple conveniencia, son aduladores de Gavin y saben que su razón de ser
o su status dependen del éxito o del nivel de complacencia de éste.
En este contexto es que se desarrollan las peripecias de “Pied
Piper”.
A simple vista la serie no tiene grandes innovaciones o “chorezas”
en la forma de contar la historia o de mostrar las escenas. En ese sentido, lo
más llamativo es la intro del programa. Dura apenas unos segundos, pero es una
presentación animada de un plano del valle, en la que a medida que va avanzando
la serie (y la contingencia real), va mostrando y jugando con los logos de las
distintas compañías tecnológicas que van teniendo renombre.
Más allá de que muchas veces se me pudieran pasar algunos
aspectos propios del área de los negocios, tecnológicos o de idiosincracia de
este mundo, aun así pude entender, reírme o quedar en ascuas por lo que
sucedería. La historia no sólo tiene situaciones absurdas y descolocantes, vueltas
de tuerca y cliffhangers. El punto es que toma como base la realidad cercana e
hitos del ambiente tecnológico reciente, y hace réplica de la contingencia de
ese mundo que podemos rastrear en casos como el extravío del prototipo de un
nuevo modelo de smartphone o la comparecencia de Mark Zuckerberg ante el
Congreso estadounidense. Por supuesto, a lo largo de la serie también se dan
pinceladas acerca de qué son o cómo funcionan algunas cosas o conceptos de los
que podemos escuchar, pero que no siempre visualizamos (o entendemos): las startup,
los análisis FODA, SCRUM, la estrategia de Meinertzhagen, las bitcoins,
robótica, el internet de las cosas, el machine learning, la realidad virtual, etc.
Pero lo central son los personajes. Todos tienen “su gracia”,
hacen un aporte particular, cada cual en su rol o en su función son atingentes y
ninguno parece sobrar. El microcosmos grotesco que muestra el
programa nos lleva a conocer una amplía galería de situaciones, comportamientos
o costumbres en el ámbito de las empresas tech: desde quienes quieren encontrar
la gallina de los huevos de oro con su idea o la de otro, los “engrupidos”, los
golpes de suerte, hasta las excentricidades de los que están en la cima, de los aspirantes a llegar ahí y en general, de todos los que ingresan
a ese mundo, y que se manifiestan por ejemplo en algo como contratar un donador
de sangre sin tener mayor necesidad o en que declararse gay esté más aceptado
que declararse también cristiano.
Algunos momentos destacados:
- Las reuniones de trabajo y presentaciones de Gavin Belson
- Cuando Richard va a ir a juicio con Gavin, desde que consigue un abogado hasta el final, en que los demás están en casa de Erlich a la espera del resultado para tomar acciones.
- Toda la parte de cuando “Pied Piper” va a hacer un streaming de la bebida “Homicida” y en qué deriva finalmente.
Carolina B. Pérez
Silicon Valley
Estados Unidos, 2014-2019
Creado por John Altschuler, Mike Judge, Dave Krinsky


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